Asturias es tierra de alimentos capaces de cautivar a cualquiera por su sabor. Pero, dentro de la calidad, hay niveles muy diferentes. En lo más alto de todo se encuentran los productos con denominación de origen. Estos son los que tienen el sello DOP, una etiqueta que solo se consigue cumpliendo con los estándares más exigentes. ¡Conoce en masymas supermercados todos los productos asturianos DOP!
DOP e IGP
Vamos a empezar por aclarar algo importante. Por un lado, tenemos los productos con Indicaciones Geográficas Protegidas o IGP. Por otro, los que cuentan con la Denominación de Origen Protegida o DOP.
Las diferencias entre ambos sellos son notables. En los productos con DOP todas las fases de producción se deben llevar a cabo en la zona que marca el origen. En los IGP, basta con solo uno los pasos de elaboración.
Esto hace que la relación del producto DOP con la zona sea máxima. Es más, el organismo que otorga esta distinción defiende que el productor en cuestión no sería posible sin el entorno. Esto es lo que sucede con, por ejemplo, el queso de Cabrales o la sidra asturiana. Por su parte, el producto IGP solo tiene que contar con una característica que sea propia de su zona de producción.
Productos asturianos con denominación de origen protegida
Queso de Afuega’l pitu
Originario de los valles centrales asturianos, este es uno de los quesos más extendidos de la región. Se trata de una variedad elaborada únicamente con leche de vacas de razas frisona y asturiana.
Se puede consumir en diferentes momentos de maduración, por lo que estará más o menos curado. No obstante, suele ser un queso que tira a fresco en todas sus variedades. Su sabor es suave, por lo que puede acompañarse de otros muchos productos. Incluso hay variedades que se fermentan con pimentón para añadir nuevos matices.
El Afuega’l pitu es uno de los quesos más antiguos de Asturias. Hay documentación que habla de él en el siglo XVIII, por lo que lleva consumiéndose cientos de años sin haber cambiado.
Queso de Cabrales
El título del mejor queso de Cabrales es algo que crea auténticas controversias en las queserías asturianas. Este se ha convertido en todo un icono de la cocina local, por lo que se añade en muchos platos.
Solo se puede producir en la zona de Cabrales o en la Peñamellera Alta si quiere contar con el sello DOP. El cabrales se hace con leches de vaca, oveja o cabra, por separado o conjuntamente. Se trata de un tipo de queso azul con un potente sabor que incluso tiene matices picantes.
Como curiosidad, te diremos que durante varios años ha sido el queso más caro vendido en subasta, según el Libro Guinness de los récords.
Queso Casín
Otro de los mejores quesos de Asturias, que no es poco decir. Procede de los municipios de Caso, Sobrescobio y Piloña y ya hay noticias suyas en el siglo XIV.
Este es uno de los quesos más complejos de hacer de Asturias. Elaborado con leche cruda de vaca, necesita al menos 2 meses de añejamiento. El resultado es un queso con un potente olor y un sabor aún más fuerte. Sus matices son picantes y acres, por lo que es todo un reto para paladares que no estén acostumbrados a él.
Queso de Gamonéu
Como el Cabrales, el Gamonéu es un queso azul. Eso sí, hay profundas diferencias entre uno y otro, por lo que cada uno tiene sus partidarios. Este último se elabora con leches de cabra, oveja y vaca, bien por separado, bien mezcladas en diferentes proporciones.
El Gamonéu es un queso tradicional que procede de la zona de Cangas de Onís. La principal diferencia con el Cabrales está en que tiene una densidad mayor. Esto se consigue comprimiendo la pasta láctea con la que se elabora el queso.
En la boca, este queso tiene una textura mantecosa que lo hace único. Los matices de su sabor presentan intensas ahumadas debido a los hongos de la fermentación. Sin duda, otro de los quesos asturianos premiados que no hay que dejar escapar.
Sidra de Asturias
Para muchos, la sidra es la esencia y la base misma de toda la gastronomía asturiana. Lo cierto es que es casi imposible no admitir que los culines están presentes en casi cualquier mesa asturiana. Así, esta es la bebida oficial de Asturias se mire por donde se mire.
Pero también es una de las joyas de su gastronomía, como lo demuestra el tener el sello DOP. Eso sí, no todas las botellas pueden contar con esta distinción. Para conseguirlo, la sidra tiene que estar hecha con alguna de las 76 variedades de manzanas admitidas.
Si alguien duda de la raigambre de la sidra en Asturias, solo hay que señalar que ya se preparaba y se bebía antes de que llegaran los romanos. El historiador Estrabón la mencionaba como la bebida tradicional de la zona, y lo mismo hacía Plinio El Viejo.
Vino de Cangas
Blancos y tintos, los vinos de Cangas son la última de las especialidades con DOP que hay en Asturias. Lo cierto es que es uno de los productos menos conocidos fuera de la comunidad. Los quesos y la sidra son símbolos asturianos. Los vinos de Cangas aún no tienen ese honor.
Sin embargo, esto no les quita ni un ápice de calidad, lo que viene demostrado por el sello DOP. Localidades como Cangas del Narcea, Allande o Ibias es donde crecen las vides que dan lugar a este vino.
Las uvas más usadas van desde la albarín y la albillo a la garnacha tintorera. Los vinos de Cangas destacan tanto en su formato tinto como en el blanco. Son vinos criados gracias al clima oceánico de la zona, lo que les da un carácter muy particular.
En definitiva, son muchos los productos con denominación de origen asturiana. Y aún más los que se merecerían este sello, como sucede con muchos embutidos y carnes. Pero lo cierto es que lo mejor de todo es poder disfrutarlos en la mesa siempre que se quiera.
