Las conservas han sido durante siglos una forma tan práctica como eficiente de preservar alimentos y garantizar su disponibilidad a lo largo del año. En supermercados masymas, apostamos por ofrecer a nuestros clientes una amplia variedad de conservas de alta calidad, que no solo destacan por ser alimentos increíblemente sabrosos, sino que también son una solución práctica para reducir el desperdicio de nuestras comidas.
En la variedad está el gusto. Y en tu masymas supermercado de confianza, sabes que dispones de muchos tipos de alimentos en este formato. Desde deliciosas mermeladas hasta el exquisito bonito del norte, las conservas son un verdadero tesoro para tu despensa y el planeta.
Diversidad y calidad que te sienta bien
La gama de conservas en nuestros días es muy rica y variada: incluyen frutas, vegetales, legumbres, pescados o mariscos, en diferentes formatos y tamaños. Las mermeladas de todo tipo son perfectas para preparar desayunos, meriendas o postres, mientras que las conservas de origen vegetal y aquellas que contienen legumbres ofrecen soluciones rápidas y saludables tu cocina diaria. El bonito del norte, un producto emblemático donde los haya, es ideal para ensaladas, bocadillos y platos principales.
Compramos, comemos y vemos anuncios de conservas todos los días, pero ¿te has preguntado alguna vez cuál es su origen?
Origen y evolución de las conservas
El arte de conservar alimentos tiene sus raíces en las civilizaciones de la antigüedad, cuando las primeras agrupaciones de personas empezaron a buscar métodos para preservar sus excedentes alimentarios. Nuestros antepasados, pasaron de ser cazadores recolectores nómadas para asentarse en poblados y domesticar animales y plantas. Es ahí donde comenzaron a darse cuenta de que tenían que encontrar algún método para conservar los alimentos que no eran capaz de consumir en el corto plazo.
El frío o el secado al sol fueron, quizá, las dos primeras opciones de conservación. Luego, pueblos más avanzados como egipcios, griegos y romanos de principios de nuestra era usaron la sal y el vinagre para la función de conservar carnes, pescados y frutas y no desperdiciarlas. Si hablamos del origen y evolución de las conservas, tenemos que hablar de un francés de nombre Nicolas Appert, pues él inició la verdadera revolución en el mundo de las conservas cuando a finales del siglo XVIII, descubrió que el calor podía ser el mejor amigo para preservar alimentos en recipientes herméticos.
Este descubrimiento se entiende como el comienzo de la industria moderna de conservas. Durante los siglos posteriores, el proceso se fue perfeccionado con la invención nuevos formatos usando nuevos materiales como las latas de hojalata, permitiendo una mayor durabilidad y seguridad alimentaria. Esa evolución en la industria no ha parado de mejorar el proceso de conservación hasta nuestra era. Hoy en día, las conservas utilizan técnicas avanzadas y rigurosos controles de calidad para ofrecer productos duraderos y sanos.
Cosas buenas de las conservas
Este formato de alimentos es uno de los productos indispensables en nuestra cesta de la compra diaria. El motivo no es otro que estos increíbles beneficios:
- Larga duración y disponibilidad: las conservas permiten disfrutar de alimentos fuera de temporada, asegurando que siempre tengas a mano ingredientes frescos y sabrosos.
- Valor nutritivo: gracias a los métodos de conservación, los nutrientes de los alimentos se mantienen intactos, ofreciendo una excelente fuente de vitaminas y minerales.
- Practicidad: las conservas son una opción conveniente para preparar comidas rápidas y deliciosas, sin comprometer la calidad de tus preparaciones. Su versatilidad es una de sus mejores armas.
- Reducción del desperdicio de alimentos: comprar y consumir conservas ayuda a minimizar el desperdicio de comida, ya que los alimentos se conservan en perfectas condiciones durante mucho más tiempo que otros alimentos.
No al desperdicio de comida
Y es que es último punto es muy importante, pues el desperdicio de alimentos es un problema global que tiene un impacto negativo en el medio ambiente. En supermercados masymas, nos comprometemos a combatir este problema promoviendo el consumo responsable de alimentos entre nuestros clientes, colaborando con empresas e iniciativas que fomentan la concienciación sobre el desperdicio de comida.
Por todo esto, el concepto de conservas es una excelente manera de reducir el desperdicio. Esa larga vida útil permite que se consuman los alimentos a lo largo del tiempo sin perder calidad y, sobre todo, sin desperdiciar los productos.
Consejos para aprovechar las conservas al máximo
- Organización de la despensa: mantén los tarros, botes y latas de conservas bien organizadas y visibles para asegurarte de utilizarlas antes de que caduquen.
- Creatividad a la hora de cocinar: piensa diferente, inspírate y crea
- recetas que incluyan conservas. Puedes crear deliciosos platos combinando diferentes tipos de conservas con ingredientes frescos.
- Porciones adecuadas: utiliza solo la cantidad necesaria de cada conserva para evitar abrir más de lo que necesitas.
- Reciclaje de envases: después de consumir las conservas, asegúrate de reciclar los envases adecuadamente para contribuir al cuidado del medio ambiente.
Ahora ya sabes un poco más acerca de las conservas, ya solo te queda pasarte por nuestra tienda online o alguno de nuestros establecimientos y prestar más atención a las secciones de conservas. ¡Te esperamos!
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