Las confituras caseras son uno de los manjares más deliciosos que podemos realizar para disfrutar en nuestros desayunos o para disfrutar de ellas en recetas como tartas o acompañando unos riquísimos frixuelos.

Pocos son los ingredientes que se necesitan y gracias a su conservación podremos disfrutar de nuestras elaboraciones todo el año.

Para realizar una confitura de ciruela Claudia necesitarás:

  • 1,5 Kg. de ciruela Claudia
  • 400 gr. de azúcar blanco
  • Zumo de ½ limón

En primer lugar, es muy  importante lavar y deshuesar muy bien la fruta. Ponla en un recipiente de cristal o loza, añádele el zumo del limón y échale el azúcar por encima sin remover. Deberás dejarla macerar en el frigorífico hasta que el azúcar se haga líquido. Posteriormente solo tendrás que cocer a fuego medio en una cacerola aproximadamente durante 45 minutos.

Para realizar una mermelada de naranja muy sabrosa necesitarás:

  • 1,5 Kg. de naranja de mesa
  • 400 gr. de azúcar blanco
  • Zumo de un limón

El paso más importante de esta receta es pelar las naranjas quitándole muy bien el albedo (las pieles blancas) y todas las pepitas. El siguiente paso es trocear y colocarlas en un recipiente, añadir el zumo del limón y el azúcar, y dejar macerar en el frigorífico hasta que el azúcar se deshaga y se convierta en líquido. Por último, cocer en una cacerola a fuego medio, aproximadamente, durante 1 hora. A continuación, pasar un poco por la batidora hasta conseguir una pasta semiespesa sin grumos.

Conservación 

La clave para disfrutar de nuestras confituras todo el año es realizar un buen proceso de envasado. Para ellos lo ideal es que los botes de cristal donde se vaya a conservar la confitura sean de boca ancha y deben estar previamente esterilizados al igual que sus tapas. Para ello, en el fondo de una cacerola se pone un paño de cocina de algodón limpio y, sobre él,  se colocan los tarros boca arriba y las tapas, cubriéndolos totalmente con agua. Se dejan hervir durante 10 ó 15 minutos. A continuación, se sacan de la cacerola y se colocan boca abajo sobre otro paño de algodón limpio hasta que se sequen. Aconsejamos esterilizar también los restantes utensilios que vayamos a utilizar durante este proceso como cucharas, tenedores, pinzas, etc.

Una vez secos, se llenan los botes con la confitura, aproximadamente hasta el cuello del tarro, no hasta arriba del todo. A continuación, los tapamos bien e introducimos en una cacerola, cubriéndolos totalmente con agua y dejamos hervir durante 20 minutos. Una vez fríos, guardamos en un lugar seco y oscuro.

Ideas

Escoge un buen pan, tuéstalo y unta con queso crema Alteza. Ponle una fina capa de confitura de ciruela Claudia o de mermelada de naranja y disfruta.

Si vas a realizar una tarta de chocolate, entre capa y capa de bizcocho puedes añadir unas cucharadas de mermelada de naranja, potenciará el sabor del cacao.

La ciruela combina a la perfección con el queso, por lo que puedes elaborar una tarta de queso poco convencional sustituyendo la mermelada de frutos rojos por una confitura de ciruela Claudia.