Si eres de los que va a comprar el pan y no aguanta a llegar a casa para meterle un bocado, eres un verdadero amante de este alimento fundamental en nuestra vida.

Hay tantos tipos de pan como prácticamente tipos de persona. La gran variedad que tenemos hoy en día se ve en los escaparates de el Horno de masymas, donde puedes elegir entre muchos tipos de barras y hogazas.

A la hora de degustarlo, también hay tantas formas como días tiene el año. Hay gente que le gustan los extremos crujientes de la barra de pan, es decir, los curruscos. O como mucha gente dice aquí, en Asturias, el cuernu. ¿Sabías que en Andalucía se le conoce como tetas? En Murcia como puntas; los canarios llaman al currusco, codo y los amigos del otro lado del charlo, en Sudamérica, lo llaman culito.

amasar pan

Pero volviendo a cómo comemos el pan, si hay gente que le gusta, y mucho, comer el currusco, hay otra que no lo quiere ni en pintura.

La miga y la corteza llevan caminos paralelos a la clara y yema de un huevo. Hay quieres prefieren una parte; otros que solo quieren la otra y, un selecto grupo que no tiene ningún tipo de preferencia.

Hablando de pan y de huevos ¿habrá algún momento más mágico que mojar la yema de un huevo frito con un tierno trozo de pan? Son pequeños placeres con los que disfrutamos al máximo.

Historia del pan

El ser humano lleva muchos siglos utilizando el cereal, en todas sus variables, como una de sus principales fuentes de alimento y subsistencia.

Hay que tener en cuenta que el cereal puro no es apto para la alimentación. Nuestros antepasados lo sabían y por eso idearon formas de poder aprovechar las bondades de este grano. Ya en la prehistoria se sabe que se machacaba el trigo, se amasaba y se cocía entre piedras para crear masas que servían de alimento.

Tanto los egipcios, los griegos y los romanos le dieron a este producto la importancia que merece, pues impulsaron nuevas técnicas para cocinarlo, experimentaron con nuevos cereales y gracias a ellos hoy tenemos el arte del panadero como negocio artesanal, pues fue hace 2.000 años cuando se comenzaron a expandir las profesiones estrechamente relacionadas con la elaboración de pan.

hogaza

Como se puede ver, el pan ha pasado de civilización en civilización, hasta nuestros días, como un alimento básico y en la actualidad, es el acompañamiento a comidas y cenas preferido por la gran mayoría, así como la base para diferentes desayunos y meriendas.

Si eres un amante del pan seguro que has probado alguna de nuestras variedades en el Horno de masymas. Si no es así, te estás perdiendo un pan de calidad, muy rico y recién horneado para que te lo lleves a casa caliente.

El Horno de masymas

Desde una crujiente celta hasta la tierna sonrisa, pasando por diferentes tipos de hogazas, baguettes y barras, en el Horno de masymas se puede encontrar un pan de gran sabor.

La apuesta por la calidad en todos nuestras secciones se ve reflejada en los frescos. Las carnes, pescados, mariscos que puedes comprar en nuestros establecimientos serán siempre alimentos de gran calidad y sabor. Lo mismo ocurre con nuestro pan. Dice el refranero español que, al pan, pan, y al vino, vino; que viene a significar que hay que hablar sin rodeos y miramientos. Pues eso hace masymas supermercados, con total claridad y transparencia se hornean los productos de panadería para que siempre haya pan caliente en las tiendas.

pan horno masymas

Si el Horno de masymas se ha convertido en un establecimiento donde diariamente van miles de clientes a por su barra preferida de pan, obviamente, no es por casualidad. La fidelidad no se regala, ni tampoco la confianza. Hay que trabajarla diariamente para conseguirla y mantenerla.

Que el pan esté rico, recién hecho y que la atención de la plantilla de masymas sea siempre exquisita son los pilares fundamentales de que nuestra sección de panadería tenga grandes fieles.

Su gran variedad de panes hace que sea ciertamente complicado escoger uno, sobre todo si eres un cliente nuevo y no tienes tu favorito. Pero aquí vuelve a resaltar, por encima de todo, el trato del personal de masymas supermercados y la ayuda que pueden ofrecerte en un momento dado. El conocimiento del producto, del tipo de corteza y miga o el punto de cocción son variables a la hora de poder aconsejar un tipo de pan u otro.

Comprar pan, y mucho más

Y no solo pan, en el Horno de masymas supermercados también puedes disfrutar de deliciosos preparados que te quitarán el hambre de dos bocados. Napolitanas, palmeras de chocolate, pizzas, calzone, bollos preñaos, pasteles y un sinfín de productos horneados en masymas para que los puedas comprar recién hechos.

Como ves, en el Horno de masymas puedes comprar un pan de gran calidad y también una amplia variedad de productos de pastelería, que son el mejor aliado cuando el hambre aprieta.

cruasán horno masymas

Come pan, come un buen pan

El mito de que el pan es malo es tan falso como el que dice que Einstein suspendió matemáticas cuando era pequeño. No, el pan no es malo. Comer pan, moderadamente, no perjudica a nuestra salud. Al contrario. Lo único que hay que hacer es comer buen pan.

Es decir, los conceptos de calidad y cantidad se juntan para decirnos que si comemos una cantidad lógica de pan al día y ese pan es de buena calidad, no solo no estaríamos haciendo algo perjudicial para nuestra dieta saludable, sino que es un gran alimento que nos aporta hidratos de carbono, proteínas de origen, vegetal, minerales y vitaminas.

Es decir: comer pan de calidad, como el que encuentras en el Horno de masymas, es bueno para tu salud. ¡No dejes de disfrutarlo!