Hay motivos suficientes para limpiar la casa, además de los puramente estéticos. Una razón de peso es la salud. La suciedad es un excelente caldo de cultivo para que se desarrollen virus y bacterias con facilidad. Mantener las estancias y los muebles limpios es tan importante como nuestro propio aseo personal.

Un hogar confortable nos garantiza una mayor calidad de vida. Para obtener la comodidad y estar a gusto en nuestro propio domicilio, la limpieza y el orden son dos factores muy importantes. Por lo que es muy interesante tener una casa limpia y ordenada.

¿Cómo limpiar?

Antes de empezar debemos de tener claro el plan de limpieza que vamos a seguir. Llevar un orden lógico nos ayudará a no ensuciar lo previamente limpiado y a conseguir unos resultados de limpieza óptimos. Así como los utensilios que vamos a necesitar, y los productos de limpieza que emplearemos para cada estancia. De todo ello dependerá el resultado final de nuestro trabajo.

Hay estancias de la casa que necesitan ser limpiadas a fondo todos los días,  la cocina y el baño.  En estos lugares en que hay mucha humedad y calor,  no solamente debemos limpiar, también es importante la desinfección.

Otras zonas en las que debemos de tener una limpieza regular son: las escaleras  y el portal,  ya que por ellas pasan todos los vecinos y se acumula mayor cantidad de suciedad.

Las demás estancias como: las habitaciones, el salón, los pasillos interiores también necesitan ser limpiadas con regularidad.

Productos:

Limpia Cristales:

Es aconsejable limpiar las superficies de vidrio o cristal, y las paredes de azulejos con limpia cristales, lavando y secando posteriormente para que queden impecables.  Para ello usaremos una bayeta que no suelte hilos, ni deje pelusas.  El papel de cocina o multiusos puede ser nuestro gran aliado a la hora de secar este tipo de superficies.

Paño de micro fibra

Limpiar el polvo de muebles y objetos decorativos sin que quede en el aire,  se consigue usando paños de cocina de micro fibra que atraen las partículas evitando que vuelen y queden en el aire.

Aplicar productos específicos para cada material nos ayuda a cuidar las superficies y a mantener la suciedad alejada, de ese modo no tener que limpiar con tanta asiduidad.

Friega suelos:

A la hora de limpiar los suelos la aspiradora puede facilitar mucho la tarea, sobre todo si la suciedad no está incrustada y se trata simplemente de polvo que hay que retirar. Cuando las manchas están incrustadas en el suelo lo aconsejable es usar agua con el detergente adecuado. En ocasiones un buen desengrasante ayuda a retirar las manchas.

Usar el producto adecuado nos facilitará la limpieza y a mantendrá las superficies cuidadas. Elegiremos friega suelos suaves para madera, cera para dar brillo,  en superficies de laminados o madera.

Usaremos lejía, desinfectante, desengrasante para las superficies de baños y cocinas.  Asegurando además de una buena limpieza, la desinfección necesarias de estas estancias. Así como quitamanchas para limpiar las juntas de azulejos o silicona.

Si nos equipamos con todo lo necesario las labores de limpieza se hacen mucho más sencillas,  nuestra casa estará impecable.

Limpiar la casa

La limpieza aporta bienestar y confort a quienes la habitamos. Usar los productos adecuados garantiza mejores resultados y un cuidado óptimo de cada superficie. Además evita la acumulación de suciedad, que favorecen la aparición de virus y bacterias.